Perú se enfrenta a una crisis política luego que el presidente Martín Vizcarra anunciara en horas de la tarde de este lunes la disolución del Congreso por "la denegación fáctica de la confianza" y convocara a elecciones parlamentarias. Posteriormente, el Parlamento peruano aprobó suspender a Vizcarra por un año, luego de discutir una moción de vacancia en el cargo por su “incapacidad moral”. La decisión fue tomada con 82 votos a favor, ninguno en contra y sin abstenciones.
Tras esta medida, la Presidencia del país fue asumida, de manera interina, por la vicepresidenta Mercedes Aráoz Fernández, quien se juramentó en el Congreso. Araoz indicó que "asumo la Presidencia respondiendo a que el presidente Martín Vizcarra ha fallado al no cumplir con tres artículos constitucionales”. La ahora mandataria interina añadió “sé que hubo muchos esfuerzos de este Congreso por llegar a consensos. Debemos seguir trabajando para que esas reformas se lleven a cabo”.
Sectores de la población han salido a las calles de Perú para expresar su respaldo a la decisión de Vizcarra al considerar que el Congreso "estaba lleno de corrupción", mientras que otros han manifestado su apoyo al ente.
La Constitución del Perú señala que la Comisión Permanente del Parlamento sesiona según la decisión del presidente, así como la celebración de nuevas elecciones parlamentarias en un período máximo de cuatro meses.
En ese sentido, la Carta Magna de Perú expresa que, de no realizarse las elecciones en el tiempo establecido, el Congreso disuelto puede reunirse, recobrar sus facultades y destituir al Consejo de Ministros.
Telesur