A la cumbre asistirán representantes de 17 departamentos para negociar con el Gobierno y comenzar a estudiar los pliegos de peticiones e iniciar las discusiones que den una solución al paro nacional.
Las protestas que cumplen este domingo 21 días, exige una gran mesa de negociación y pese a que se ha firmado una serie de preacuerdos en cuatro departamentos, el paro continúa en otros 14 territorios, principalmente en el sur, donde se siente con mayor fuerza.
La reunión convocará a los gobernadores de Caquetá (suroriente), Nariño y Putumayo (suroeste), Tolima (centro occidente), Cauca y Huila (sur occidente), así como a representantes del gremio agrícola, con el fin de solucionar la grave crisis del campo, la educación y salud mermadas por políticas neoliberales.
El presidente Juan Manuel Santos, que ha tenido que desplazarse a varias regiones para tratar de establecer diálogos con los campesinos, delegó en el vicepresidente esta tarea con la esperanza de levantar el paro en esa zona.
Garzón dijo que fue autorizado por el Presidente para anunciar a los sectores en paro que, de poner fin a los bloqueos, el Gobierno está dispuesto a nombrar una comisión de alto nivel para que les de solución a las peticiones.
El escenario más complejo se vive actualmente en el sur colombiano donde algunos de los departamentos permanecen en una situación crítica como el Caquetá, Cauca o Huila.
El propio Garzón ha reconocido que la gente está cansada de vivir tan pobremente. "Los derechos humanos tienen que partir de tratar a la gente dignamente y los acuerdos que se firmen deben cumplirse y no deben ser para dilatar las soluciones", expresó en una reciente alocución.
Hasta el momento, las protestas han dejado 303 heridos, 11 de ellos con armas de fuego, 247 detenciones arbitrarias y nueve fallecidos, de acuerdo a cifras divulgadas por la Mesa Agropecuaria y Popular de Interlocución y Acuerdo.
Los manifestantes rechazan el modelo económico del Gobierno que, según sostienen, "ha posicionado políticas antiobreras y antipopulares, que coartan y limitan derechos, privatizan instituciones y entregan nuestros recursos naturales a las transnacionales".
Además, los pequeños agricultores buscan garantías para el acceso a la propiedad de la tierra, la constitución de zonas de reserva campesinas, una política favorable a los mineros artesanales y mejoras en las zonas rurales, especialmente en cuanto a salud y acceso al agua potable.
Aunque el paro ha cedido en una parte de la nación, por otro lado los restantes sectores han ratificado que no se moverán y preparan otra gran movilización para el 11 de septiembre.