Una de las principales consecuencias del mal estado nutricional de la mujer, antes y durante la gestación, es el bajo peso de sus hijos al nacer (menos de 2.500 gramos), lo que aumenta el riesgo de que el niño o la niña mueran antes de cumplir el primer año de vida. Por esta razón, NUEVA EPS tiene dentro de sus programas de Promoción y Prevención uno para el control prenatal y la atención del recién nacido, desde el que se realizan controles periódicos para disminuir el riesgo que tiene la madre o el bebé de enfermar y morir.
Este programa es gratuito y se desarrolla en todas las IPS primarias. La Compañía, además, da a conocer las siguientes recomendaciones:
• Toda mujer gestante, a menos de que presente exceso de peso, debe aumentar la cantidad de alimentos que consume diariamente; esto es aún más importante si es adolescente, delgada o de baja estatura.
• La gestante necesita incluir en su alimentación víveres como leche y sus derivados, carnes, leguminosas secas, frutas y verduras. También puede mejorar el valor nutritivo de su alimentación si acompaña las comidas con cereales, frutas y verduras.
• Si durante la gestación la mujer presenta vómitos excesivos, tolerará mejor los alimentos si los divide en un mayor número de comidas. Es importante que no disminuya la cantidad de alimentos que debe consumir diariamente.
• En algunos sitios existe la falsa creencia de que si la madre aumenta el consumo de alimentos, el niño crecerá y el parto será difícil. Por el contrario, un mayor consumo de alimentos asegura el normal desarrollo del niño o la niña y las mejores condiciones de la madre en el momento del parto. No obstante, no se recomienda una ganancia exagerada de peso durante el embarazo.