Con este indicador, Barranquilla se ubica como la segunda ciudad capital, después de Bogotá, con mejor desempeño fiscal del país y la primera en la región Caribe.
 
El IDF permite medir el desempeño de la gestión financiera de las entidades territoriales en función de la viabilidad fiscal, la capacidad de generación de recursos propios, el endeudamiento, los niveles de inversión y la capacidad de la gestión financiera.
 
Para la secretaria de Hacienda, Lanny Quintero Jaraba, esta clasificación “es satisfactoria, pues responde a todos los esfuerzos que en materia fiscal ha hecho Barranquilla durante los últimos 16 años y a las estrategias implementadas tras el impacto de la pandemia para mantener unas finanzas sólidas y estables”.
 
Este resultado, que está por encima del de otras ciudades capitales como Medellín y Cali, además, reafirma el estado de solvencia del Distrito que, de acuerdo con el DNP, se les otorga a entidades territoriales con puntajes entre 70 y 80 puntos y significa “finanzas saludables y con oportunidades de mejora en algunos de sus indicadores”, explica la funcionaria.
 
Detalles de la medición para Barranquilla
 
La metodología de cálculo del IDF tiene en cuenta dos dimensiones: resultados fiscales con 80 % y gestión territorial financiera con 20 %. En la primera se miden la inversión, dependencia de las transferencias, endeudamiento y medidas de déficit o superávit. Y en la segunda la capacidad de programación y ejecución de los ingresos, la ejecución de la inversión y las bonificaciones por esfuerzo propio y actualización catastral.
 
En la dimensión de resultados fiscales, el Distrito obtuvo la segunda mejor calificación entre las ciudades capitales, después de Bogotá, con 70.76 puntos de 100 posibles. Por su parte, en la dimensión de gestión financiera territorial ocupó el tercer lugar después de Pasto y Bogotá con 95.49 puntos de 100 posibles.  
 
Barranquilla también se destacó como la ciudad capital que más invirtió en formación bruta de capital con relación al total de la inversión, obteniendo un puntaje de 100 sobre 100, lo cual es resultado de la ejecución del plan de inversiones del Plan de Desarrollo 2020 - 2023 ‘Soy Barranquilla’. “En este punto es importante mencionar el compromiso de nuestros contribuyentes, la confianza del Gobierno nacional y el respaldo de la banca nacional e internacional, cuyos aportes nos permiten tener una alta capacidad de ejecución de la inversión a favor de los barranquilleros”, menciona la secretaria Quintero.
 
Además, la ciudad obtuvo la máxima calificación posible en otros dos indicadores. Uno es el nivel de holgura respecto al límite de la Ley 617 de 2000, lo cual fue posible gracias al crecimiento del 30 % de los ingresos corrientes de libre destinación (ICLD) con respecto a la vigencia 2021 y un crecimiento de los gastos de funcionamiento más moderado. Y el otro está relacionado con la capacidad de programación y recaudo de ingresos, donde se obtuvo un puntaje de 100 sobre 100, como consecuencia de la alta capacidad de planificación y el ajuste de proyecciones, clave para la toma de decisiones.
 
La secretaria de Hacienda distrital explica que la pandemia representó un gran reto en los procesos de planeación financiera, pero gracias al trabajo en equipo y a la evaluación de distintos escenarios teniendo en cuenta factores macroeconómicos, medición del retorno financiero de la inversión pública distrital y análisis de tendencias con la aplicación de herramientas estadísticas, el Distrito logró un nivel de ejecución de los recursos propios de 105 % entre las vigencias 2020 y 2022.
 
Bonificaciones en el puntaje
 
Otro aspecto para destacar del IDF es que Barranquilla obtuvo dos bonificaciones en el puntaje gracias a las dos gerencias adscritas a la Secretaría de Hacienda.
 
Una que premia el esfuerzo de la Gerencia de Gestión de Ingresos por mejorar la gestión del recaudo en el Distrito, logrando una recuperación destacada de los ingresos tributarios y no tributarios propios, lo que va de la mano con el cumplimiento de los contribuyentes.
 
Esta bonificación ratifica el resultado del más reciente Índice de Competitividad de Ciudades (ICC) 2023, elaborado por el Consejo Privado de Competitividad y la Universidad del Rosario, donde la ciudad obtuvo un puntaje de 10 sobre 10 en el indicador que mide la capacidad de recaudo tributario a nivel local, siendo primera en este aspecto, por encima de ciudades como Bogotá y Medellín.
 
La segunda bonificación fue otorgada por mantener el catastro actualizado, gracias a la Gerencia de Gestión Catastral que desde hace siete años gestiona de manera autónoma el catastro de Barranquilla y se esfuerza por mantener una base catastral sólida, robusta y 100 % actualizada.
 
Por último, el Distrito también obtuvo mejoras en los indicadores de balance fiscal primario, pasando de una calificación de 60 puntos en 2021 a 80 puntos en 2022; y en el indicador de capacidad de ejecución de la inversión, pasando de 70 puntos en 2021 a 80 puntos en 2022.