La reciente rehabilitación del paso peatonal en los callejones del ‘meao’ y Robertico es una muestra más de la decidida apuesta del Distrito por cambiarle la cara al Centro para que “poco a poco se vuelva un dinamizador de la cultura y la gastronomía. Estos son iconos que nos demuestran que sí es posible, además de la belleza natural que tiene nuestro Centro, nuestra belleza arquitectónica, nuestra riqueza, que hay que saber aprovechar”, expresó el alcalde Jaime Pumarejo.
El plan, que cuenta con el respaldo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y el financiamiento de la Unión Europea, busca beneficiar a alrededor de 300.000 personas que habitan, circulan o trabajan en espacios icónicos del sector.
Uno de los rostros que le dan sentido al plan es el de Noralbys Contreras, una de las cocineras reubicadas en la galería comercial Robertico. Ella pasó de numerosos desafíos, al vender comida en las calles, a tener un espacio adecuado para trabajar en sus platos. “Estar en esta zona ha sido maravilloso, me ha ido superbién, ya no me maltrata el carretillero, no me maltrata el agua o el sol, tengo un espacio súper. Me siento orgullosa de lo que hago, de mi negocio; he sido bendecida por Dios, gracias a que después de 26 años de trabajo he logrado consolidar este proyecto de vida”, comenta.
De hecho, en aras de revitalizar estos espacios, los planes de la Alcaldía de Barranquilla están enfocados en impulsar su dinamismo y convertirlo en un atractivo turístico en el Atlántico, con su plan de renovación integral. De este modo, la reactivación del Centro tendrá un impacto positivo en la economía y mejorará la experiencia de venta para comerciantes, facilitando el escenario para sus compradores.
“Nos sentimos cómodos. Para nosotros es un bienestar estar en el sitio que estamos, una zona más decente. Lo mismo ocurre con las personas que vienen de afuera, porque se sienten más a gusto por el ambiente que hay”, asegura Cristóbal Castro, quien además de ser comerciante, también es comprador recurrente del sector.
Mercados y galerías entregadas a la fecha
Galería Robertico. Desde su inauguración, el 9 de julio de 2021, esta edificación, con un área total de 1.978 metros cuadrados y 178 locales, permite la comercialización de productos como ropa, calzado, artículos en cuero, bisutería, celulares, accesorios, electrodomésticos, piñatería, productos para el cuidado del bebé, productos naturistas, entre otros.
Galería San Nicolás. Una de las primeras galerías, ubicada en la carrera 41 # 32-23. En este espacio se reubicaron 124 locales para vendedores que no contaban con el espacio adecuado para desarrollar sus labores. En total, se dispuso de 1.694 metros para los comerciantes anteriormente ubicados en la carrera 43 entre calles 30 y 34, Paseo Bolívar, fachada de Bancomercio y callejón del ‘meao’.
Esquina del Arte. Esta esquina logró darle una nueva cara a la esquina del Paseo Bolívar. Epicentro de artículos decorativos para celebraciones en icopor y madera, 34 comerciantes fueron beneficiados con su reubicación en el espacio. La colorida esquina está en el Paseo Bolívar con carrera 39 y fue inaugurada el 30 de junio de 2022.
Mercado de Empresas Públicas Municipales EPM. Ubicado en la carrera 45 con calle 30, con 407 locales renovados, una plaza de frutas, verduras, abarrotes y productos cárnicos, baños, buena ventilación, iluminación y una mejor organización para encontrar sus productos, dignificando así el sector para que los comerciantes puedan seguir ejerciendo su actividad económica.
Plan para la reactivación socioeconómica
Los esfuerzos distritales le apuntan a continuar con el renacer del Centro de la ciudad, entendiendo la importancia del sector como punto cultural y comercial destacado. En ese sentido, la consultoría de IDOM, articula el plan para la reactivación socioeconómica del Centro Histórico de Barranquilla como resultado de la alianza de cooperación triangular de la Unión Europea junto con la ciudad de Málaga y Santo Domingo; plantea directrices tanto en aspectos físico-espaciales, sociales, culturales, económicos y ambientales, así como los diferentes mecanismos de gestión y financiamiento.
Este plan realizado se espera que se articule con los diferentes instrumentos de planificación urbana existentes en el Distrito de Barranquilla para garantizar su perdurabilidad en el tiempo y la construcción de una visión conjunta de desarrollo del territorio en el corto, mediano y largo plazo.
El plan plantea 3 tipos de proyectos: corto plazo hasta 5 años, mediano plazo hasta 10 años y largo plazo hasta 20 años. Cabe aclarar que este estudio debe incluirse a otros instrumentos de planificación de la ciudad, siendo un importante insumo para la actualización del Plan de protección y manejo del Centro Histórico de Barranquilla.
Los mercados y galerías que vienen
En aras de seguir articulando acciones para cumplir el plan trazado, los trabajos para reactivar las obras continúan en el mercado Barlovento que estará conectado con la intendencia fluvial; el mercado Sredni, un escenario que albergará a 150 vendedores que se desempeñan en la actividad de mercadeo de productos de miscelánea; el mercado del Río, de La Loma, con una oferta de productos como prendas de vestir, calzado, entre otros y, por último, el mercado Gran Bazar, que contará con una inversión cercana a los 27.000 millones de pesos.
Una tarea que continúa; de hecho, el secretario de Control Urbano y Espacio Público, Ángelo Cianci, resalta el compromiso por el proyecto. “Desde la Administración distrital, seguimos aunando el compromiso de reactivar, cada día, la recuperación de los espacios públicos del Centro Histórico, dignificando la calidad de vida de los barranquilleros que frecuentan sus calles, de los vendedores, comerciantes y de las personas que devengan su sustento diario en esta zona patrimonial de la capital del Atlántico”.
Con estas iniciativas, la ciudad le apuesta a recuperar su identidad cultural y a poner en valor su patrimonio arquitectónico y comercial. Se espera que, en un futuro cercano, el Centro de Barranquilla se convierta en un destino obligado para residentes y visitantes, ofreciendo una experiencia única y vibrante que celebre la riqueza histórica y la vitalidad de la ciudad.