En un comunicado emitido este sábado desde Kabul, capital afgana, el Gobierno ruso enfatizó la necesidad de que las fuerzas extranjeras salgan del país asiático como condición “innegable” para lograr la paz. El mensaje, dirigido a Estados Unidos (EE.UU.) y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), denunció la obstaculización de la paz en el territorio asiático por parte de los militares foráneos.

Asimismo, insiste en que la ruptura de los diálogos entre las fuerzas talibanes y Washington no debe influir en los esfuerzos por terminar la guerra por la vía diplomática. “La suspensión de las negociaciones entre los talibanes y EE.UU. no debería debilitar los prolongados intentos en Catar. La vía diplomática es la única solución para la crisis en Afganistán”, asegura el documento.

El pretexto esgrimido por el ocupante de la Casa Blanca para cancelar las reuniones fue el atentado perpetrado por los talibanes en Kabul, con un saldo de 42 personas heridas y 12 muertes, incluidas la de un soldado estadounidense y uno rumano . Los talibanes, quienes se niegan a establecer conversaciones directas con el Gobierno de Ghani hasta que se retiren los ejércitos extranjeros en suelo afgano, denunciaron la actuación de Trump y enviaron delegaciones a otros países a discutir la retirada de las tropas estadounidenses y el retorno a las negociaciones para conseguir un acuerdo de paz.

El vocero del Gobierno afgano Sediq Sediqqi dio a conocer este sábado que las consultas para la paz en Afganistán entrarán en una pausa hasta después del último sábado de septiembre. Igualmente, el portavoz ratificó la celebración de elecciones el 28 de septiembre próximo y rechazó la idea de formar un gobierno de transición en Afganistán. Afganistán se encuentra en una situación de inestabilidad política, social y de seguridad acentuada desde hace 18 años cuando Estados Unidos y sus aliados de la OTAN invadieron el país en una alegada cruzada contra grupos insurgentes talibanes.

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