Así lo manifestó la subsecretaria de Prevención y Atención de Desastres de la Gobernación del Atlántico, Candelaria Hernández, al término de un recorrido por el corregimiento de La Peña y Aguada de Pablo.
"Nos reunimos con la comunidad de La Peña, estuvimos revisando y monitoreando el embalse de El Guájaro, con ellos generamos algunas acciones que vamos a implementar de manera conjunta con la Alcaldía de Sabanalarga y la comunidad", dijo Hernández.
Entre esas acciones, coordinadas por las Secretarias de Infraestructura e Interior, se encuentran el cierre de algunas bocacalles con sacos rellenos de material seleccionado y el alquiler de motobombas para estar preparados en caso de una emergencia.
En el recorrido también participó el secretario de Interior, Yesid Turbay; el subsecretario de Vías y Construcción del departamento, José Luis García; los alcaldes de Sabanalarga, Jorge Manotas; y de Manatí, Evaristo Olivero; delegados de la CRA, integrantes de la Defensa Civil y líderes de la comunidad.
La Alcaldía de Sabanalarga, a través de la Defensa Civil, iniciará un censo de las calles que podrían estar en inminente peligro, con la finalidad de identificar el número de viviendas que resultarían afectadas ante una eventual inundación.
Por su parte, la bióloga Ayaris Rojano, dijo que desde la Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA) han venido haciendo acompañamiento desde el conocimiento de la gestión del riesgo.
"Hicimos un recorrido por La Peña y Manatí ubicando los sitios estratégicos que pueden llegar a inundarse en algún momento. Precisamente, teniendo en cuenta una modelación que hizo la corporación, en donde establecimos que se puede llegar a tener niveles de más o menos 5.5 metros sobre el nivel del mar teniendo en cuenta las proyecciones que hace el Ideam durante este mes de noviembre", dijo Rojano.
La funcionaria agregó que, una vez identificados los puntos de mayor vulnerabilidad, vienen trabajando de la mano de la Gobernación para adelantar las acciones de mitigación que se pueden llevar a cabo antes de que se presenten los eventos.
"En Manatí, hicimos una visita de inspección de los sistemas de los canales de drenaje ubicados sobre puente militar y puente amarillo, que llegan directamente al casco urbano del municipio y revisamos que las compuertas estén totalmente cerradas y militarizadas, para garantizar la seguridad de las personas en todo el embalse de El Guájaro", explicó el secretario de Interior, Yesid Turbay.
De acuerdo con el subsecretario de Vías y Construcción, José Luis García, se espera ubicar unos 7 mil sacos con material, aportados por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo, en las bocacalles por donde se podría meter el agua desde el Guájaro a las poblaciones ubicadas en jurisdicción de Sabanalarga. "Desde la Secretaría de Infraestructura, seguiremos acompañando a los municipios y monitoreando los niveles del embalse con nuestros especialistas para apoyar las labores preventivas", indicó.
Sobre el tema, el alcalde de Sabanalarga, Jorge Manotas, expresó que realizarán mesas de trabajo para determinar algunas acciones que deben hacer desde el punto de vista de infraestructura para mitigar el riesgo.
