“Existe un 60 por ciento de probabilidad de este fenómeno en el mar Caribe y, como consecuencia, nos van a afectar las lluvias. Es importante mantener activos los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo y que los cuerpos de socorro voluntarios estén atentos ante cualquier situación de emergencia. Por ello, enviamos una circular a los mandatarios municipales para que, a manera de prevención, estén atentos ante cualquier situación”, dijo la subsecretaria de Prevención y Atención de Desastres, Candelaria Hernández.
Hernández insistió que el Ideam recomienda estar muy atentos durante los próximos cinco días, toda vez que estos sistemas atmosféricos en la gran mayoría vienen acompañados de lluvias, tormentas eléctricas y vientos por encima de lo normal. Por lo anterior, se sugiere a la comunidad en general y a las entidades del Sistema Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres tomar las medidas preventivas.
La Subsecretaria agregó que, luego de las fuertes lluvias ocurridas en la tarde del martes, se vieron afectados cinco municipios, entre esos Sabanalarga, donde la Subsecretaría de Prevención y Atención de Desastres del departamento ayer hizo entrega de ayudas humanitarias a los afectados.
Asimismo, la funcionaria recomendó estar atentos durante los próximos días a los comunicados e información emitida por el Ideam y las demás autoridades locales y municipales de emergencia.
De igual forma, atender las indicaciones y recomendaciones de las entidades de control, organismos de emergencia y de respuesta, disponer y compartir con los familiares y vecinos los números telefónicos de los organismos de respuesta municipales.
También se invita a la comunidad a conocer y revisar los planes de emergencia, las rutas de evacuación y los puntos de encuentro. Ante la posibilidad de creciente súbita, se recomienda estar atentos a las alertas hidrológicas emitidas en los diferentes boletines.
Otras recomendaciones
Ante tormentas eléctricas se recomienda buscar un refugio seguro. No exponerse en zonas abiertas, debajo de árboles y estructuras metálicas altas, toda vez que podrían ser objeto de descargas. Evitar actividades deportivas en áreas abiertas en el momento de tempestades. Asegurar y revisar el estado de los tejados y de estructuras elevadas que puedan colapsar por causa de vientos fuertes, por encima de lo normal.
Para la zona marítima se recomienda:
Activar y reforzar las medidas de prevención orientadas a la reducción de los riesgos causados por esta clase de eventos, tanto a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y a los Consejos Departamentales y Municipales de la región Caribe, así como del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, para que, junto con las comunidades, se tomen las medidas necesarias a fin de evitar pérdida de vidas humanas y bienes materiales.
A los operadores de pequeñas embarcaciones, turistas y pescadores, se les aconseja seguir de cerca la evolución diaria de las condiciones meteorológicas y marinas. De igual manera, es importante que atiendan las recomendaciones emitidas por las Capitanías de Puerto.
Se les recomienda a los alcaldes de los municipios costeros del departamento del Atlántico contemplar el cierre de playas en el evento que la onda tropical alcance la calidad de ciclón y golpee fuertemente nuestro mar Caribe.
En el caso de que las playas no sean cerradas, se debe contemplar la posibilidad de aumentar el cuerpo de colaboradores, que vigilan la seguridad y tranquilidad de estos balnearios, como medio de respuesta ante las posibles emergencias.