Las características comunes de Guayaquil y Barranquilla, por ser ambas ciudades de mar y río, su clima, su población y el impacto de la pandemia en estas dos ciudades, siendo Guayaquil la más duramente golpeada en Latinoamérica por tasas de contagios y de fallecimientos, permitieron este diálogo sobre las estrategias adecuadas que deben implementarse en la batalla contra el coronavirus para proteger a la población y salvar vidas.
Nebot destacó la importancia de invertir en la prevención y en las acciones de socialización de las medidas de autocuidado. "No te enfermes, no te mueras. Eso hay que inculcarlo mucho", dijo. Y asegurar atención a quienes lo requieran: "Hay que atacar a los casos tempranos".
Para el exalcalde ecuatoriano es vital el aislamiento preventivo para contener la tasa de contagios, lo mismo que las medidas que conduzcan a aliviar la crisis. "La cuarentena sirve, pero mata de hambre, mata la economía”, señaló, agregando que en el caso de Guayaquil “la estrategia también fue guardar a la gente con comida mínima para que no tuvieran que salir".
El exalcalde de Guayaquil consideró que, más que tener unidades de cuidados intensivos, el mayor esfuerzo debe centrarse en que la gente no llegue a necesitarlas. “No digo que no hay que tener UCI, el gran desafío es no llegar a ellas", recalcó.
Pumarejo Heins le expuso a Nebot las principales estrategias que se han venido aplicando en Barranquilla, entre ellas el fortalecimiento de la red hospitalaria, teniendo en cuenta que "los tiempos de la pandemia no los pudimos manejar nosotros, pero pudimos comprender las acciones de otros, como las de Guayaquil".
El alcalde barranquillero citó, entre las principales acciones de Barranquilla en la batalla contra el virus: "Hoy tenemos 645 respiradores, somos la ciudad con mayor capacidad de estos, per cápita. También somos la ciudad que más muestras ha tomado por cada 100.000 habitantes. Más de 100.000 pruebas PCR y un promedio de 2.000 y 2.500 pruebas diarias".
En materia de prevención, el mandatario barranquillero resaltó las búsquedas activas en sectores específicos de la población. “Nos dimos cuenta que hay que atender a los mayores de 60 años, por su condición de riesgo elevado. Con la estrategia +60 descubrimos que cuidamos la tasa de mortalidad y esto nos tiene muy contentos, lo logramos escuchando experiencias", afirmó.
Pumarejo sostuvo que “nos da tranquilidad la actividad de remisiones, hay una disminución y a través del Centro Regulador de Urgencias CRUE nos damos cuenta de que hay menos cantidad". De igual manera, resaltó que "la tasa de positividad va disminuyendo, teniendo en cuenta que el día se toma desde el primer día de los síntomas y no desde el día de la prueba"