Adicionalmente, y gracias a entidades como el Sisbén, la Registraduría, Secretaría de Recreación y Deportes, Salud, Cultura y muchas otras, fueron prestados servicios de vacunación, identificación y recreación.
6.000 habitantes de la localidad Riomar se beneficiaron con los múltiples servicios ofrecidos en la carrera 84 entre las calles 82 y 85. La secretaria de Gestión Social, Karen Abudinen, expresó su complacencia por la receptividad que tuvieron los vecinos con la Feria BiBa.
“Cada día la feria se consolida como el escenario principal de reducción de pobreza y mejoramiento de la calidad de vida de la población que actualmente se encuentra en situación de vulnerabilidad”, afirmó Karen Abudinen.
Cientos de abuelitos pudieron registrarse para acceder al programa Subsidio Distrital, al igual que los jóvenes para pertenecer a Jóvenes en Acción, Universidad al Barrio y Jóvenes con Propósito.
“Nunca había visto bailar breakdance, solo en televisión y tampoco tantas carpas juntas alrededor de mi casa. Me inscribí en el programa Jóvenes con Propósito porque quiero trabajar por mi proyecto de vida y, además, aprender a bailar como ellos”, cuenta emocionado, Jorge Jiménez, de 16 años, y residente en San Salvador.
Como parte de su campaña de arborización, el Damab realizó la entrega de 300 árboles frutales, los cuales fueron adoptados por la comunidad que de inmediato comenzó a sembrarlos al frente de sus casas y en sus patios.
“Me pareció muy interesante porque nos enseñaron el valor de la naturaleza y lo importante de las zonas verdes del sector, como los alrededores del río y el parque. A los vecinos y a mí nos regalaron arbolitos de mango, guayaba y guanábana que esperamos crezcan rápido para recoger los frutos”, aseguró Alicia Quintero, habitante de Siape.
Igualmente, en el marco de una campaña adelantada por la Secretaría de Salud, la feria permitió vacunar a perros y gatos contra la rabia.