Según un estudio, en Latinoamérica casi cuatro de cada diez partos se realizan por cesárea (38,9%), muy por encima de lo recomendado desde hace 40 años por la OMS. Colombia presenta una tasa del 43% en esta práctica.
Mientras la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el uso de la cesárea, como mucho, en el 15 % de los partos, en Colombia el promedio es del 45 %, es decir el triple de lo sugerido, siendo los departamentos de la región Caribe los de más alto porcentaje, especialmente el Atlántico que hace un par de años registró la mayor tasa de cesáreas practicadas, con un 74 %, seguido por Magdalena, Córdoba y Cesar.
Aunque la Organización Mundial de la Salud establece que la tasa de partos por cesáreas no debe superar el 15%, en Barranquilla la cifra es de 66%.
“Seguimos preocupados por el aumento del número de cesáreas en las instituciones prestadoras de salud del régimen subsidiado y contributivo de la ciudad. Es por eso que en los últimos dos años hemos venido implementando estrategias a nivel de la red pública, que han ido entregando buenos resultados en cuanto a la disminución de las cesáreas”, aseveró la secretaria de Salud, Alma Solano Sánchez.
Las medidas adoptadas en la IPS Universitaria en Barranquilla han permitido lograr una proporción más equilibrada entre partos vaginales y cesáreas con un predominio de los partos (56%) frente a las cesáreas (43.8%), con todas las ventajas que esto implica para el binomio madre- hijo.
En medio de las acciones implementadas para reducir las cesáreas, evitando complicaciones en las maternas, hemos logrado observar una disminución en la razón de mortalidad materna, de acuerdo a la semana epidemiológica 26 de 2017, en comparación con los años anteriores.
El parto vaginal es el método normal del nacimiento, ya que ofrece múltiples beneficios para la madre y el recién nacido, como menor riesgo de complicaciones, menor probabilidad de muerte materna, sangrado posparto, infecciones maternas severas, menos dolor y reinicio más rápido de las actividades normales, además de que aumenta el apego entre la madre y el recién nacido y mejora la lactancia materna.
En cuanto a las complicaciones por cesáreas, las mujeres que se someten a este método sin ninguna justificación podrían presentar en futuros partos hemorragias, infecciones severas, complicaciones embólicas, anormalidades en la implantación de la placenta y hasta la muerte, además de una recuperación más lenta y dolorosa.
Por otro lado, en los recién nacidos por cesárea, se ha comprobado que se incrementa el riesgo de presentar dificultades respiratorias y de hospitalización, especialmente cuando la madre no ha tenido trabajo de parto.
La administración distrital de Barranquilla seguirá promoviendo el incremento del porcentaje de partos vaginales, creando condiciones que lo favorezcan como el tipo de contratación a los especialistas por parte de los prestadores, supervisión de los prestadores por parte de los aseguradores, fortalecimiento del recurso humano de las universidades con facultades de la salud, compromiso de las aseguradoras con sus usuarios para la promoción del parto vaginal normal, y promoción en la comunidad general de las bondades del parto vaginal normal y los riesgos de la cesárea.