Cada año estas especies vegetales son utilizadas de manera indiscriminada para la tradicional celebración del Domingo de Ramos, lo que atenta contra el medio ambiente, dado que ellas pertenecen al sistema de flora silvestre que se encuentra en vía de extinción, situación que preocupa a la autoridad ambiental del Distrito.

Ramas de Olivo es una opción recomendable para vivir esta devoción católica, debido a que tendremos una semana santa en la que haremos una reflexión por la naturaleza y los cambios climáticos que estamos padeciendo.

“Hacemos un llamado a los feligreses católicos para que conserven esta especie y empleen ramas de olivo u otros vegetales que no se encuentren amenazados. Estamos listos para decomisar las palmas a todos aquellos vendedores que de manera irresponsable aun continúan con esta práctica que atenta contra el medio ambiente”, manifestó Jackeline Reina, directora del Damab.

El Damab reitera el llamado a la comunidad católica para que adopte una actitud de protección al medio ambiente y respeto por la naturaleza, evitando así la extinción de la palma. Igualmente exhorta a los jerarcas de la iglesia Católica para que motiven a la preservación de esta especie de las familias de las Palma, las cuales tienen un lento crecimiento que alcanza su edad reproductiva luego de 40 a 100 años, cuando alcanza entre 25 y 60 metros de altura, dependiendo de la especie.

De igual manera, la autoridad ambiental del Distrito de Barranquilla continua realizando operativos de control y vigilancia sobre el tráfico y comercio ilícito de fauna silvestre, principalmente especies como la Tortuga icotea, Chigüiro o Ponche que durante la época de Semana Santa se incrementa el consumo.

Con estos controles también se ejerce vigilancia sobre el comercio de otras especies, como aves: canarios, azulejos, papayeros, Psitácidos (guacamayas, pericos, loros, cotorras) y entre otros productos, huevos de iguana e icotea.

Estos operativos tendrán la coordinación y acompañamiento de la Policía Ambiental y Ecológica, se realizarán en diferentes puntos de la ciudad, donde presentan actividades que afectan las especies de fauna y flora silvestre.

“Las personas que se encuentren en flagrancia realizando este tipo de actividades a los recursos naturales quedan sujetas a la aplicación de la Ley 1333 de 2009, por tanto hacemos un llamado para que nos concienticemos, evitemos su consumo y protejamos nuestros recursos renovables de fauna y flora”, puntualizó Reina Senior.

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