El proyecto, adelantado con el apoyo de la Fundación Círculo Abierto y la Universidad del Atlántico, se desarrolló conjuntamente con los actores y maestros del Distrito, generando una respuesta al cambio y ofreciendo nuevos significados al papel de los niños como protagonistas de su aprendizaje, a partir de una perspectiva de derechos.
“Los agentes educativos son las personas más cercanas a los niños y niñas, después de sus padres. Son clave en el desarrollo, estimulación, crecimiento y estima de estas personitas. Invertir en educación continua para los maestros y retarnos a nuevas formas de implementar el conocimiento en beneficio del desarrollo integral de los pequeños es un reto de la Secretaría de Gestión Social y de esta administración”, dijo Karen Abudinen, secretaria de Gestión Social del Distrito.
Este enfoque se trabajó a través de temas vivenciales y pedagógicos, entre los que se encontraron: La Imagen de las Maestras y Maestros, La Escucha Empática, Modelando la Inclusión, El Aula un Lugar Seguro para las Niñas, Matemáticas Naturales, Lectura y Escritura Creativa, Rincones de Expresión y Proyectos de Investigación; todos con una metodología innovadora que utiliza el arte como herramienta de aprendizaje.
Los graduandos cumplieron un mínimo de 120 horas de formación para certificarse, lo cual les permite ser protagonistas de un circuito permanente que facilitará la implementación de esta educación que hace a los niños protagonistas de sus vivencias.
“Con este primer grupo de maestros cualificados empieza una carrera sin límite, permanente, consistente y coherente por los procesos de educación continuada que garanticen que nuestros agentes de cambio –como son los maestros- estén a la vanguardia de los modelos dedicados a la infancia y sean también protagonistas de formar el bienestar barranquillero con estándares de talla mundial, agentes actualizados e inquietos por el conocimiento, lo que seguramente se traduce en niños y niñas más felices”, agregó Karen Abudinen.