El gerente territorial de Electricaribe para Atlántico Norte, Ramiro Castilla Andrade, y la gerente de Gestión Social, Flor García, socializaron los pormenores del proyecto de optimización eléctrica, en reunión virtual realizada con la presencia de funcionarios de las Secretarías de Gobierno y Planeación del Distrito, Gerente de Alumbrado Público y representantes de la Personería.
Los proyectos implican el cambio de la infraestructura actual que presenta dificultades, incluyendo postes, redes, medidores y transformadores.
Las obras comprenden la instalación de 185 nuevos transformadores, 405 postes de baja tensión, 614 postes de media tensión, 42 kilómetros de red de baja tensión y 21 kilómetros de red de media tensión.
La financiación de este proyecto está garantizada a través de recursos del CONPES 3910 y 3966, por 16.011 millones de pesos, y de Electricaribe por 839 millones de pesos. Adicionalmente, es importante señalar que los clientes no tendrán que asumir algún costo por las obras.
Estos proyectos contarán con la modernización del sistema de medición, a través de tecnologías de infraestructura de medición avanzada, AMI, mediante las cuales los clientes podrán tener un mejor seguimiento y por ende, control de sus consumos, con el propósito de verificar ahorros y aplicación de buenas prácticas de consumo.
“En el diseño del proyecto se tuvieron en cuenta todos los estándares para garantizar la calidad y seguridad, que son la prioridad para Electricaribe. Venimos trabajando conjuntamente con las comunidades y líderes de los barrios Ciudadela 20 de Julio, La Sierra, La Victoria y Cevillar para garantizar la ejecución de esta inversión que beneficia a más de 8.062 familias de estos sectores”, afirmó Ramiro Castilla Andrade, Gerente de Electricaribe en Atlántico Norte.
Por su parte, la Agente Especial de Electricaribe, Ángela Patricia Rojas Combariza, quien por su directriz se ejecutan los proyectos de manera prioritaria para la mejora eléctrica de la región Caribe, resaltó que “estas obras no sólo significan la modernización a nivel técnico, sino que impacta positivamente en la calidad de vida de las comunidades porque una energía de calidad es sinónimo de desarrollo socioeconómico. Nuestro compromiso es total y está respaldado por serios procesos de intervención social que inician en la fase previa a la ejecución de la obra, de la mano con los actores sociales clave”.
Asimismo, resaltó que un equipo de profesionales del área de Gestión Social desarrolla un importante trabajo con metodologías participativas con líderes y grupos de base del sector en los barrios beneficiados.