Los motores fabricados para trabajar con gas natural se están imponiendo en el mundo, pues este combustible representa ahorros significativos para las empresas de transporte y una reducción considerable de las emisiones de material particulado. Actualmente, Colombia ya cuenta con vehículos que de fábrica vienen con motores a gas, gracias a los desarrollos y tecnologías de marcas como Scania, Kenworth, Daewoo, Iveco, Dina, Cummins, Nissan, NPU y Equitel.
Lo anunciado hoy en Barranquilla representa un cambio significativo en el futuro de la matriz de combustibles, pues tal como sucedió hace 30 años cuando los motores diesel reemplazaron a los motores a gasolina, los motores a gas natural empezarían a sustituir las tecnologías a diesel del transporte pesado de Colombia.
“Nos llena de orgullo ser testigos de la evolución tecnológica que inicia hoy por parte de los representantes de las fábricas de buses y camiones; esto ratifica que el gas natural se convertirá en el diésel del futuro, con todos los beneficios económicos y ambientales que representa para el país y las empresas de transporte.”, anotó Santiago Mejía, Gerente de Gestión de GNV de Terpel.
El uso del Gas Natural Vehicular, es hoy en día una tendencia mundial en los transportes masivos, que adoptan países con gran afluencia turística como Estados Unidos, Corea, China, España, Perú e Italia. Estas nuevas apuestas de los fabricantes de buses y camiones permiten a Colombia ponerse a la vanguardia en materia de vehículos a GNV y ser un país más competitivo y sostenible en materia de transporte de pasajeros y de carga.
La sustitución de diésel por gas natural genera importantes beneficios energéticos, ambientales y económicos que demuestran que es conveniente, recomendable y oportuno fomentar y masificar el uso de este combustible en la flota de servicio de pasajeros y de carga, por su eficiencia e impacto en la calidad del aire. En materia energética, permite equilibrar la matriz energética del país, liberar capacidad de exportación de hidrocarburos y disminuir el déficit del fondo de estabilización; en el aspecto ambiental, los motores a GNV producen 98% menos material particulado que otros combustibles; y en el ámbito económico, el GNV permite ahorros superiores al 30% al compararlo contra el diesel, con desempeño eficiente y un desarrollo sustentable para las ciudades, permitiendo estabilizar en el tiempo las tarifas de transporte para los usuarios y evitando que los operadores presenten dificultades económicas.
Motivados por estos importantes beneficios, en Colombia ciudades como Medellín y Cartagena ya le apuestan al GNV. Medellín se destaca como la primera ciudad en optar por el gas natural como una tecnología limpia para movilizar el Sistema de Transporte Masivo de la ciudad. El Metroplus en Medellín registró en un año un ahorro cercano a los 112 millones de pesos por cada bus articulado, factor que permite un mayor retorno a la operación y un menor incremento de tarifas para los usuarios del servicio de transporte masivo. Adicionalmente, ha permitido a los ciudadanos respirar un aire más puro y a los más de 35 mil pasajeros que se movilizan por este medio de transporte, pagar una tarifa más estable.
En el caso de Cartagena, recientemente el Gobierno local tomó la decisión de operar el Transcaribe con GNV, lo cual traerá grandes beneficios a la ciudad en términos de calidad de aire y economía.