De bandera de Luxemburgo, tiene una capacidad de dragado de 4.400 m3; un diámetro de succión de 900 mm y una profundidad máxima de dragado de 28.5 m.
“Dadas las condiciones naturales del río Magdalena, siempre es un reto disminuir la afectación que la sedimentación tiene sobre la desembocadura, ya que existen un conjunto de factores relacionados con los efectos del ingreso del agua del mar y los altos niveles de caudal del río, lo que genera unas condiciones muy complejas que se traducen en reducción de la profundidad y del ancho del canal navegable”, aseguró Pedro Pablo Jurado, director de Cormagdalena.
Es importante anotar que ante esta situación y por las dificultades presentadas con la disponibilidad de dragas en la región, se tomó la decisión, junto con Findeter, de contratar la draga que pudiera atender el canal en el menor tiempo posible y de manera más expedita.
Cormagdalena sigue al frente de la situación y en cabeza del ministerio de Transporte ha gestionado más recursos ante el ministerio de Hacienda, con el fin de disponer de una draga permanente.