Djokovic además confirmó el contagio de su esposa Jelena y el resultado negativo de sus hijos. El serbio de 33 años, quedó en el ojo de la polémica, ya que muchos indicaban que era una mala idea realizar este tipo de certámenes en plena pandemia, sin embargo, el jugador afirmó que la exhibición se hizo con todos los protocolos de bioseguridad pertinentes.
Ante este escenario, la ATP se ve en alerta roja, ya que se tiene pensado reiniciar los torneos en el mes de agosto y los protocolos de bioseguridad no paracen ser suficientes.