“Un gran territorio, como lo es Barranquilla y su área metropolitana, merece una Gran Vía. Por eso, este miércoles 2 de noviembre arrancamos las obras de este proyecto que merece nuestro departamento y que impulsará el desarrollo turístico, la conectividad y competitividad del Atlántico”, dijo la gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera.
La mandataria departamental agregó que las obras son de todos y, para hacerlas realidad, se harán algunos cierres de carril y desvíos que generarán cambios en la movilidad.
“Para mitigar estos cambios, es muy importante que todos contribuyamos y acojamos el plan de manejo de tráfico, que ha sido socializado por el contratista, la interventoría y nuestros funcionarios, para que, una vez culminen los trabajos, todos podamos disfrutar de los beneficios de la Gran Vía”, añadió.
Desde este miércoles, se cerrará la calzada norte del corredor, sentido Barranquilla – Puerto Colombia, entre el final del puente de la 51B sobre la Circunvalar y la calle 111 (acceso al Colegio Parrish).
Sin embargo, en la calzada sur, sentido Puerto Colombia – Barranquilla, se habilitará un carril para cada sentido.
La Secretaría de Tránsito y Transporte de Puerto Colombia, con el apoyo de la Policía de Tránsito, velarán por la seguridad vial.
Entre las primeras obras que hará el contratista Consorcio Vial Barranquilla está la demolición del pavimento existente de la vía.
Especificaciones
El proyecto de la Gran Vía contempla la construcción de 3.55 kilómetros en doble calzada y tres carriles, una ciclorruta, zona peatonal y dos pasos a desnivel o deprimidos: uno a la altura de la Universidad del Norte y otro en el centro comercial Le Champ.
Se construirán tres glorietas (Universidad del Norte, Le Champ y Universidad del Atlántico), tres nuevos puentes ciclo-peatonales (Colegio Sagrado Corazón, Colombo Americano y Universidad del Atlántico), obras de urbanismo y paisajismo, iluminación Led y las redes eléctricas en los puntos críticos y las de telecomunicaciones serán subterranizadas.
A partir de este miércoles 2 de noviembre, arrancan las obras de la Gran Vía, un proyecto que conectará a Barranquilla con Puerto Colombia y que mejorará la conectividad, la competitividad y dinamizará aún más el turismo del Atlántico.
“Un gran territorio, como lo es Barranquilla y su área metropolitana, merece una Gran Vía. Por eso, este miércoles 2 de noviembre arrancamos las obras de este proyecto que merece nuestro departamento y que impulsará el desarrollo turístico, la conectividad y competitividad del Atlántico”, dijo la gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera.
La mandataria departamental agregó que las obras son de todos y, para hacerlas realidad, se harán algunos cierres de carril y desvíos que generarán cambios en la movilidad.
“Para mitigar estos cambios, es muy importante que todos contribuyamos y acojamos el plan de manejo de tráfico, que ha sido socializado por el contratista, la interventoría y nuestros funcionarios, para que, una vez culminen los trabajos, todos podamos disfrutar de los beneficios de la Gran Vía”, añadió.
Desde este miércoles, se cerrará la calzada norte del corredor, sentido Barranquilla – Puerto Colombia, entre el final del puente de la 51B sobre la Circunvalar y la calle 111 (acceso al Colegio Parrish).
Sin embargo, en la calzada sur, sentido Puerto Colombia – Barranquilla, se habilitará un carril para cada sentido.
La Secretaría de Tránsito y Transporte de Puerto Colombia, con el apoyo de la Policía de Tránsito, velarán por la seguridad vial.
Entre las primeras obras que hará el contratista Consorcio Vial Barranquilla está la demolición del pavimento existente de la vía.
Especificaciones
El proyecto de la Gran Vía contempla la construcción de 3.55 kilómetros en doble calzada y tres carriles, una ciclorruta, zona peatonal y dos pasos a desnivel o deprimidos: uno a la altura de la Universidad del Norte y otro en el centro comercial Le Champ.
Se construirán tres glorietas (Universidad del Norte, Le Champ y Universidad del Atlántico), tres nuevos puentes ciclo-peatonales (Colegio Sagrado Corazón, Colombo Americano y Universidad del Atlántico), obras de urbanismo y paisajismo, iluminación Led y las redes eléctricas en los puntos críticos y las de telecomunicaciones serán subterranizadas.