La empresa explicó que debido al arrojo de residuos cortopunzantes en las bolsas de basura, los operarios se enfrentan a riesgos continuos en su labor a pesar de los implementos de seguridad que usan, como guantes, mascarillas, gafas y botas.

“Los accidentes más frecuentes son los cortes y los pinchazos en manos, dedos, e incluso heridas en las piernas, debido a la presencia de elementos cortopunzantes en las bolsas de residuos sólidos, los cuales se disponen de manera inadecuada por la comunidad. Hasta el momento no hemos tenido enfermedades infectocontagiosas, pero es un riesgo que está latente. Cuando el usuario manipula jeringas, por ejemplo, se desconoce el origen o las condiciones de estos elementos”, expuso Zandra Mantilla, gerente de Aseo de Triple A.

En los últimos tres años, 56 operarios de la empresa han resultado víctimas de la incorrecta disposición de residuos cortopunzantes, debido a que los usuarios arrojan a las bolsas, sin la debida protección, elementos como jeringas, vidrios, pedazos de lozas, clavos y cuchillos.

Las consecuencias de este tipo de accidentes podrían terminar en posibles contagios de enfermedades como el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), el Virus de la Hepatitis B (VHB) y el Virus de la Hepatitis C (VHC). Con base a información del Ministerio de Salud, las exposiciones de riesgo biológico ante estas enfermedades son consideradas una urgencia médica, pues se dispone de 72 horas desde ocurrida la exposición, para instaurar un tratamiento profiláctico adecuado, dada la alta replicabilidad viral en el caso del VIH, del VHB y del VHC.

“Ante la ocurrencia de estos hechos, Tripe A activa de manera inmediata su protocolo de bioseguridad para el operario afectado. Sin embargo, nos preocupa este riesgo que se crea por falta de cuidado de los usuarios al momento de presentar estos residuos”, señaló Mantilla. ¿Qué podemos hacer los usuarios?

La compañía invitó a los usuarios a tomar acción y prevenir posibles accidentes, por lo que dio a conocer unas pautas sugeridas al momento de disponer los residuos cortopunzantes:

 Al desechar jeringas, clavos, puntillas u otros objetos cortantes, fórralos en cartón, papel o colócalos en recipientes cerrados y resistentes, como botellas o contenedores plásticos. Asegúrate de cerrarlos correctamente para evitar fugas y pinchazos.

 Las latas y otros objetos de metal pueden ser reciclados, pero asegúrate de aplastarlos o doblarlos para evitar bordes filosos antes de colocarlos en la bolsa de residuos.

 Enseñemos a nuestras niñas, niños y jóvenes sobre la importancia de desechar adecuadamente objetos cortopunzantes y sobre los riesgos asociados a un manejo irresponsable de estos elementos.