“Luego de dos años de haber tomado la medida de restringir el mototaxismo vemos con gran complacencia los avances obtenidos en este proceso de formación y vinculación de quienes se dedicaban a esta actividad, lo mismo que de recicladores, comerciantes informales y otras personas que tuvieron su oportunidad y hoy las estamos graduando gracias a una alianza público-privada que hizo el Distrito con Fenalco, como operador, luego de haber definido la metodología con el PNUD, y con el SENA y el Departamento para la Prosperidad Social como socios estratégicos”, dijo la mandataria distrital.
La alcaldesa Noguera destacó que “con este tipo de proyectos el Distrito y el sector privado están incentivando la superación de la pobreza de manera integral” y que “este no ha sido un proceso fácil porque implicó desprenderse de una actividad a la que dedicaron gran parte de su vida, pero hoy ellos están viendo que el entrar a la formalidad les ofrece grandes ventajas, entre ellas la salud y una mejor calidad de vida, y por eso creen en este programa, creen en la Administración Distrital y creen en la empresa privada”.
El director de Fenalco Atlántico, Carlos Jiménez, se declaró muy complacido con este programa y manifestó que para ejecutarlo el Distrito invirtió este año 500 millones de pesos y que por sus buenos resultados la entidad operadora solicitó que para el próximo año los recursos se amplíen a 1.600 millones, con el propósito de aumentar su cobertura.
El programa, coordinado desde la gerencia de Proyectos Especiales del Distrito de Barranquilla, tiene el objetivo de fortalecer las capacidades para lograr la integración productiva y económica de la población en situación de pobreza y vulnerabilidad, orientándolos en una ruta de empleabilidad y una ruta de emprendimiento.
Entre los certificados se encuentran 566 exmototaxistas que en meses anteriores habían recibido un incentivo económico en la capacitación para el empleo, muchos de los cuales ya se encuentran vinculados laboralmente con el Distrito, como vigías de movilidad, vigías ambientales, o con empresas privadas que les han abierto sus puertas.