
Colombia liderará la CELAC con ambiciosa agenda regional: transición energética, salud, cambio climático e inclusión, entre sus prioridades
En el marco de la IX Cumbre de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), celebrada en Tegucigalpa, la región reafirmó su apuesta por la integración política, el multilateralismo y el trabajo conjunto frente a los desafíos comunes. El encuentro concluyó con la adopción de la Declaración de Tegucigalpa, un documento clave que traza la hoja de ruta del bloque y marca el inicio del liderazgo de Colombia como Presidencia Pro Témpore para el periodo 2025-2026.
Zona de Paz y rechazo a sanciones unilaterales
Las jefas y jefes de Estado de los 33 países miembros reiteraron la plena vigencia de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, subrayando la importancia del respeto al Derecho Internacional, la autodeterminación de los pueblos y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados.
En línea con ese espíritu, la CELAC rechazó de manera categórica la imposición de medidas coercitivas unilaterales, en particular aquellas que afectan el comercio internacional y vulneran principios fundamentales de la convivencia entre naciones.
Candidatura latinoamericana —y femenina— a la ONU
Uno de los mensajes más contundentes de la declaración fue el respaldo a que una persona de América Latina y el Caribe —preferiblemente una mujer— ocupe próximamente la Secretaría General de las Naciones Unidas. La CELAC recordó que, de los nueve titulares que ha tenido la ONU, solo uno ha sido latinoamericano y ninguno mujer, por lo que consideró “oportuna y adecuada” una candidatura que refleje la diversidad y el liderazgo de la región.
Colombia asume liderazgo regional con enfoque en energía, inclusión y salud
La Cumbre dio la bienvenida a Colombia como Presidencia Pro Témpore del mecanismo regional. El país sudamericano presentó una agenda ambiciosa que incluye transición energética, autosuficiencia sanitaria, movilidad humana, cambio climático, pueblos indígenas y afrodescendientes, educación, seguridad alimentaria, conectividad, innovación tecnológica y lucha contra la delincuencia organizada transnacional, entre otras prioridades.
Se trata de una apuesta por dinamizar el papel de la CELAC como interlocutor global, fortaleciendo la integración regional desde una mirada inclusiva, sostenible y centrada en los derechos.
Reconocimiento a Honduras y su rol como articulador regional
Durante el evento, los Estados miembros agradecieron el trabajo realizado por Honduras como Presidencia saliente, reconociendo su impulso a encuentros de alto nivel sobre temas estratégicos como energía, igualdad de género, cooperación financiera, seguridad alimentaria y el fortalecimiento de la educación. También se destacaron los espacios de diálogo convocados por Honduras en el marco del 79° periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU.
Haití en el centro de la preocupación regional
La CELAC refrendó su “firme respaldo a la estabilidad de Haití”, uno de los países más golpeados por la inestabilidad política, la violencia y la crisis económica. El bloque se comprometió a apoyar de forma decidida los esfuerzos por restablecer un entorno de seguridad humana, en articulación con la comunidad internacional y las Naciones Unidas, apostando por un enfoque integral de desarrollo y reconstrucción.
Una apuesta por el multilateralismo y la acción conjunta
Finalmente, los Estados miembros subrayaron la necesidad de fortalecer las intervenciones conjuntas de la CELAC en los foros multilaterales, como una forma de proyectar una voz unificada frente a temas de interés común: desde el cambio climático y el acceso equitativo a la tecnología, hasta la lucha contra las desigualdades sociales y económicas.
La Declaración de Tegucigalpa marca así un nuevo capítulo para el organismo regional, en un momento en que América Latina y el Caribe buscan mayor protagonismo en la escena global, y donde la cooperación Sur-Sur, el diálogo político y la acción coordinada aparecen como las herramientas clave para enfrentar los desafíos del presente.