Durante el Consejo se hizo un amplio análisis estadístico de los casos de intentos de suicidio, violencia intrafamiliar, violencia de género, intoxicaciones y consumo de sustancias psicoactivas.
Asimismo se socializó las distintas asistencias técnicas que se han suministrado en las Instituciones Educativas de Galapa y demás municipios del Atlántico.
Desde la administración local se resaltó que el esfuerzo debe continuar por fortalecer los valores desde la niñez, para que no se presente ningún tipo de violencia física, psicológica o verbal en la etapa adulta y tampoco el consumo de sustancias psicoactivas. Así como reforzar el trabajo con los mayores por solidificar los lineamientos sociales. Por tal razón se realizaron talleres madre FAMI (ICBF), talleres en instituciones educativas, Escuela Padres y lineamientos generales para desarrollar las Zonas de Orientación Escolar, ZOE, como alternativa para el manejo de las situaciones de consumo de sustancias psicoactivas, SPA, al interior de los colegios.
“Tenemos una amenaza muy fuerte relacionada con las Instituciones Educativas golpeadas por el tema de las drogas. Nuestro país estuvo inmerso en la producción de droga, y hoy, lastimosamente, algunos de nuestros jóvenes han caído en el flagelo de la drogadicción, adherido el tema del bullying y el maltrato intrafamiliar. Por eso adelantamos este trabajo interdisciplinario, para definir los puntos necesarios que nos permita erradicar estas problemáticas sociales”, comentó el alcalde municipal, Carlos Silvera.
La mesa que también estuvo presidida por Hernando Viloria, Secretario Técnico de la Secretaría de Salud Departamental y delegado del gobernador, Juan Algarín, Asesor de la Secretaría de Salud Departamental, Duberlys Ramos, delegada de la Estación de Policía de Galapa, Ingrid Mercado, Profesional de Apoyo Vigilancia Epidemiológica, Zoila Llanos, Secretaria de Salud de Galapa y Maryoris Cervantes, Psiquiatra de Medicina Legal, coincidió en mostrar resultados desde los trabajos de campo que se adelanten en las instituciones educativas, barrios o zonas comunes para así contrarrestar los problemas del consumo de estupefacientes, el suicidio y la violencia intrafamiliar.