El trabajo de investigación consistió en tomar el PVC como residuo sólido agro industrial y llevarlo por un proceso de metodología experimental a través de ensayo error con el  fin de generar elementos productivos, en este caso se mezcló con mortero para hacer adoquines para pavimentos. La ventaja del PVC es que es un material que no se degrada y reutilizándolo contribuye a acciones de economía circular, ecodiseños y a la construcción sostenible. 

“Con estos adoquines se analiza la posibilidad de acudir a otras fuentes de elementos y a la inclusión de residuos para construcción generando una reducción de costos y sobre todo del impacto ambiental”, señaló el ingeniero Carlos Pacheco, docente del Programa de Ingeniería de la Universidad del Norte.

El proceso investigativo se convirtió en una experiencia productiva en la que los estudiantes de Ingeniería Civil trabajaron con el material entregado por Triple A mostrando su liderazgo ambientalista, la capacidad de reutilización de los residuos y las oportunidades de emprendimiento.

“Desde Triple A le apostamos a la construcción sostenible de Barranquilla y por ello generamos este proceso con la academia para que los futuros profesionales se conviertan en actores importantes en el desarrollo de la ciudad, ya no en el rol de generadores de residuos sino como aprovechadores de los mismos”, destacó Jorge Navia, Gerente de Regulación y Aseo de Triple A.

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