Los primeros informes, tanto a nivel de restaurantes como de otros participantes de la feria, dan cuenta de una superación total de las expectativas que tenían en relación con los resultados que proyectaron en términos comerciales, con crecimientos que oscilan entre un 30% y un 70%, según testimonios recogidos entre los expositores.

Entre las razones que explican los niveles de crecimiento de esa dimensión los expositores consultados citaron las condiciones que ofrece Puerta de Oro, Centro de Eventos del Caribe, la operación por parte de Corferias y la experiencia acumulada de Cruz Roja Atlántico y Fenalco Atlántico, como organizadores.

El Punto Múltiple del Sabor vendió en un solo día más que las ventas totales en los tres días de feria del año pasado. “No descansamos de 12 a 4 de la tarde por la cantidad de gente que vino, casi que nuestro personal se tuvo que multiplicar para cumplir los pedidos de los clientes. Estamos contentos con el recinto, es mucho más amplio y con las condiciones adecuadas para brindar la mejor experiencia al público, que es la idea. Gracias a Sabor Barranquilla muchos restaurantes se dan a conocer y otros reafirmamos nuestra calidad y podemos ofrecerle a los clientes una experiencia muy satisfactoria en términos culinarios y de atención”, resaltó Hernando Moyano, administrador de la cadena de restaurantes. 

Subarashi Sushi Bar, de comida japonesa, triplicó sus ventas de la primera jornada en relación con la misma de la versión anterior y su administradora Andrea Cure destacó que aunque la asistencia fue masiva y el recinto aparentemente estaba lleno, nunca hubo inconformidades por parte del público por incomodidad o distribución de espacio. “Al contrario, los comensales estaban impresionados por el tamaño y las cosas nuevas como las cervezas artesanales y los utensilios de cocina, y porque notaron que hay más variedad y amplitud en comparación a otras ferias”, destacó.

Seis horas antes del cierre del primer día, es decir a las 4 de la tarde, Jimena Mendoza, de La Gran Paella, tuvo que recoger los utensilios que trajeron porque agotaron todas las existencias de comida que había preparado: “Nunca habíamos tenido un primer día tan extraordinario. Vendimos, por lo menos, un 30% más que el equivalente al primer día del año pasado. Por eso el restaurante, que cumple 40 años de existencia, se reforzó para atender la alta demanda que esperan para lo que queda de la feria”.

Para otros, como Raúl González Moscarella, Sabor Barranquilla ha sido la plataforma perfecta para el lanzamiento de su ingenioso Raspa Cucayo. “El primer día fue espectacular por la extraordinaria acogida de la gente. Pensaban que lo del Raspa Cucayo era una vaciladera, pero cuando lo vieron se nos dispararon las ventas y los contactos comerciales. Es un gane total no solo por el recinto, sino por la experiencia. Es lo mejor que le ha pasado a Barranquilla en los últimos años. Para mí es una experiencia nueva. Estábamos preparados para vender, como máximo, 100 paellas. Pero vendimos 150 y nos quedamos cortos. Además hemos hecho relaciones comerciales para impulsar el Raspa Cucayo con lanzamientos, contactos, y networking. Puerta de oro es lo que lo que necesitábamos”.

Una experiencia similar tuvieron los jóvenes emprendedores de Cervezas Magdalena. “El primer día fue excelente, superó todas nuestras expectativas en cuanto a ventas. Es la primera vez que nuestra marca está en un evento de esta magnitud. Superamos casi que un 50-70% durante el primer día y esperamos duplicar esta cantidad los dos días restantes. Nos alegra la acogida que hemos tenido por los barranquilleros, además porque nuestra marca es una remembranza a la edad dorada de Barranquilla y porque estamos frente al río Magdalena. Hemos hecho bastantes contactos que parecen llevarnos a negocios muy buenos porque tenemos muchas propuestas de diferentes ciudades del país”, dijo Leopoldo Fadul, gerente de Cervezas Magdalena.   

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